
Hoy cesare en mi empeño,
de poder alcanzar un apice de esa felicidad,
que cuando era niña quise alcanzar,
cual estrella fugaz,
se resbalo de mi manos,
el fracaso y la tristeza,
cojidos de la mano me vinieron a buscar,
destellos de luz apartaron de mi vida,
dejaron mi ventana vacia,
y mis lagrimas mortecinas,
se olvidaron aquietadas,
en una esquina,
Hoy soy una sombra errante,
en busca de palabras,
transeuntes y distantes,
quiero gritar al viento,
despejar imagenes,
en mi pensamiento,
mas solo encuentro,
en la palidez de mi rostro,
un desaliento,
tal de desconcierto y silencios,
vago por callejas,
rotas de dolor,
alejan los rayos de luz,
yo espero y cada dia muero un poquito mas.....MARIA
