
como el eco del piano quisiera varear por tus labios de cuspidiscencias y sabores a ambrosia y a rosaledas perdidas en oquedades de melancolias,
cual cristal de difuminios quedaron perdidos los latidos de tu corazon junto al mio,
enebrare mis errores de silencios maltrechos,
pensamientos de sin sabores verdades perdidas en el tiempo,
en esta carcel de viejas leyendas olvidadas tras el resqucio abyacente de tu mirada aletargada,
encuentro a aquel con quien comparti mi vida en palacetes de cuentos y princesas mas seguir caminado por aquella acequia sucia y vacia infestada de ratas a medida,
mas el camino es mi propia vida extinguida y sumida en perdidas de memorias confundidas con palabrerias parafernalias asumidas en descansos de toda una eternidad consumidas........
Hola cielo siempre me repito pero simplemente precioso escrito
ResponderEliminarun beso de Luna
¿Por qué tanta melancolía, Luna?
ResponderEliminarLa vida es bella.
Mis respetos,
El Profesor
Querida María, en mi blog tienes un regalo con un reto que con tus grandes cualidades literarias superarás fácilmente, espero que lo aceptes.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Que bello ramillete de palabras que me hacen soñar , me imagino un campo lleno de bellas palabras que tu sabes entrelazar tan bien para hacernos soñar
ResponderEliminar¡Que curioso es el sueño! No tienes control sobre tu cuerpo y este, relajado y tranquilo deja asomarse, por un momento a nuestro otro yo, al joven impaciente, al joven ilusionado, sediento de nuevos retos, de nuevas aventuras, ese que duerme... ¡cuando estamos despierto!
¡Duerme! Querida amiga
Que yo recogeré palabras para ti
¡Duerme! Querida amiga
Cuando duermes, yo vigilo tu sueño."
Hermoso de veras... Un besazo amiga
En este poema has dibujado el mortal ejercicio de la vida. Es un crematorio de verdaderas y falsas promesas y huellas que serán quemadas en el nuevo tribunal de las ofrendas
ResponderEliminarCon cariño Víctor manuel